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Las bolas contra polillas son casi 100% ingrediente activo, y el ingrediente activo puede ser naftaleno o paradiclorobenceno. Cada ingrediente activo puede causar diferentes efectos a la salud si la exposición es lo suficientemente alta. Las bolas contra polillas pasan lentamente de ser sólidas a vapores tóxicos. Cuando siente el olor, está inhalando el insecticida. Las bolas contra polillas también pueden ser peligrosas si son masticadas o ingeridas. Los niños, las mascotas y la fauna silvestre pueden confundirlas con alimentos o dulces y comérselas. Una bola contra polillas puede causar daño serio si un niño pequeño se la come.
Si alguien ha tragado una bola contra polillas, llame al Centro de Control de Envenenamientos al 800-222-1222 para recibir consejo médico de emergencia. Si usted piensa que su mascota ha comido una bola contra polillas, póngase en contacto con su veterinario o uno de estos recursos de emergencia.
Para obtener información adicional sobre los efectos a la salud de las bolas contra polillas, vea los recursos a continuación o llame a NPIC 800-858-7378 (8:00am - 12:00pm Hora del Pacífico), o envíanos un correo electrónico a npic@ace.orst.edu.
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